Por Andrei Rodríguez 07/02/2023
Lucas Ignacio José Joaquín Pedro de Alcántara Juan Bautista Francisco de Paula Alamán y Escalada, mejor conocido como Lucas Alamán, nació en la ciudad de Guanajuato el 18 de octubre de 1792. Asimismo, es conocido por ser una de las principales figuras políticas en fundar el antiguo Partido Conservador de México. Entonces, ¿quién fue realmente Lucas Alamán?
Fue un historiador y político mexicano considerado el más insigne intelectual del conservadurismo mexicano. Fue, ante todo, un hombre que dedicó grandes esfuerzos al progreso económico y cultural de su país. Impulsor de la industrialización de México, para Alamán la base de la igualdad política y social del individuo era la enseñanza: "Sin instrucción no hay libertad, y, cuanto más difundida esté aquélla, tanto más sólida se hallará ésta." De ideología conservadora, se comportó en cambio como un verdadero progresista en el terreno industrial y económico. De él dijo Humboldt que era una de las inteligencias mejor cultivadas que había conocido. (Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «Biografía de Lucas Alamán». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004). Disponible en https://www.biografiasyvidas.com/biografia/a/alaman.htm.
Entonces, teniendo en cuenta su biografía podemos decir que Lucas Alamán era un hombre adelantado a su tiempo, hoy día los conservadores mexicanos se fundamentan en la cátedra de pensadores como: Aristóteles, Platón, Sócrates, Tomas de Aquino, Tomas Moro, Erasmo de Róterdam, Nicolas de Maquiavelo, John Locke, Adam Smith, Edmund Burke, Friedrich Hayek, Milton Friedman, Agustín Laje, Nicolas Márquez, Miklos Lukacs, etc. En general, el conocimiento de cada uno de los autores mencionados ha enriquecido el debate y la crítica conservadora frente al wokismo y a las políticas socialistas-comunistas que hoy día buscan acabar con la idiosincrasia de occidente.
Por consiguiente, Lucas Alamán debe ser retomado por los conservadores mexicanos como referente del pensamiento conservador y de derecha en México y del mundo por muchas razones. En primer lugar, porque Alamán configura bien los elementos que debe caracterizar a un verdadero conservador hecho y derecho con base a los siguientes criterios: el conservadurismo como posición política, la visión de la industria y el libre mercado como base de la economía, la educación como metodología para el desarrollo no solo intelectual sino también crucial para el desarrollo civil del mexicano, la valoración de la hispanidad como parte de la identidad cultural de las naciones latinoamericanas “incluida la propia nación de Estados Unidos por tener en su historia influencia hispana”, el aprecio a las costumbres y tradiciones, no sólo de México, sino también de los demás países de habla-hispana que tienen como afinidad la fusión de dos mundos, el prehispánico y la europea.
De forma similar, algunos autores retoman importantes hechos de su vida. A su vez, relatan importantes obras y acciones que Alamán aportó a México como: su historia, su independencia e incluso su desarrollo económico. Por ejemplo, Guillermina del Valle Pavón nos menciona lo siguiente:
Alamán puso especial empeño en impulsar los municipios. Desde el Ministerio de Relaciones fomentó su establecimiento instruyendo a los pueblos sobre los requisitos necesarios para su erección y, siempre que ocupó cargos públicos, se esforzó por evitar que las funciones municipales se restringieron a la esfera política apoyando sus atribuciones de carácter administrativos". En este aspecto, Mora coincidió plenamente con Alamán al opinar que solo una mayor responsabilidad en el ámbito administrativo remediaría la situación de los municipios. El interés de Alamán por que los ayuntamientos cumplieran con sus múltiples funciones justicia, policía, educación, asistencia social y obras públicas lo condujo a reclamar la administración de los "propios" y "arbitros" por parte de los municipios. Asimismo, demandó claridad de cuentas a los subdelegados y jueces de letras, en quienes había caído el manejo de los bienes de comunidad a raíz de la restauración de las reformas administrativas introducidas por los Borbones a finales del siglo XVIII. (Del Valle, Guillermina. Lucas Alamán: un hombre en una época de transición, Instituto Mora, 1994, pp. 43).
De igual forma y para concluir este artículo, Eric Van Young en su obra De una memoria truncada a una historia majestuosa: El caso de Lucas Alamán nos aporta lo siguiente:
Alamán veía a Gran Bretaña como el modelo de modernización más viable, y, por ende, como el camino para salir de la condición colonial y superarla. Admiró las estables instituciones monárquicas, el liberalismo moderado y la creciente fuerza industrial del Reino.
No es de extrañar que sintiera fascinación por Edmund Burke, gran pensador y político irlandés, cuya obra maestra, Reflections on the Revolution in France (1790), fue uno de los constructores modernos más importantes del conservadurismo. Alamán leía con avidez las obras de otros pensadores políticos y sociales de la época. Veía en la industrialización el camino hacia el futuro en una sociedad que en sus tiempos era abrumadoramente agraria. En su madurez, luchó para resolver varias preguntas respecto a México, entre ellas, el carácter y los límites del republicanismo; el papel de una aristocracia no oficial, sino con talento natural para guiar el destino del país y contener la fuerza explosiva de la política popular; el problema racial en una sociedad con esencia de una gran tradición cultural indígena, cuya población mayoritaria seguía siendo una subclase étnicamente señalada; los postulados de la ciencia versus la doctrina y la devoción católica, y el problema clave de cómo recordar los tres siglos de gobierno colonial español. (Van Young, Eric. De una memoria truncada a una historia majestuosa: el caso de Lucas Alamán Desacatos, núm. 50, 2016, pp. 16).
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